domingo, 24 de octubre de 2010

Mira en mi Rostro Viejo el Florecer de la Risa


Un día desde el poder dijeron “Los del otro lado del río no son gente” y nos exterminaron. Otro día “Los indios no tienen alma” y nos exterminaron. “Aquellos no creen en dios ni en nuestra religión” y nos exterminaron. Después “Son judíos” y nos exterminaron y desde los judíos “Son palestinos” y nos exterminaron. “El problema es que son negros” y nos exterminaron. Que “Son extranjeros” y nos exterminaron. Que “Son vecinos” y nos exterminaron. “Que son pobres, lumpen, cargan un bollo de pan y una carterita de ron” y nos exterminaron y cuando ya nos habían exterminado a todos se dieron cuenta cuando ya no quedaba nadie, que nosotros no éramos el problema.
Fue entonces cuando el poder empezó a mirarse, a palparse a escucharse y supo donde estaba el problema, el poder no acepta ni raza, ni color, ni etnia, ni religión, ni mayorías, ni minorías, ni credos en tanto no sean el obedecer ciego.
El poder es ignorante, desconoce el multiverso, sólo cree en el universo, lo sostiene el pensamiento único, teme a lo diverso, lo distinto, lo diferente, lo que nace.
El problema no somos nosotros, puede desaparecer Chávez y seguiremos existiendo; el comunismo y seguiremos existiendo; las religiones y seguiremos existiendo; los partidos y sus ideologías de izquierda, de derecha, del medio, de arriba, de abajo y seguiremos existiendo; el chavismo y seguiremos existiendo, el chavecismo y seguiremos existiendo.
El problema no somos nosotros. Pregunta de dónde te viene el odio y la amargura, si siempre te he trabajado, y me has llamado flojo; amamantado y me has llamado inútil, te he dado sexo y me has llamado depravado. No es nuestro ni nace de nosotros el odio. De nosotros la vida, la ternura, la alegría. Mira en mi rostro viejo, cansado y desdentado, el florecer de la risa.
Entiendan bien esto, los de allá y los de acá, hemos elegido y entregado mandato a hombres y mujeres a través de una ley constitutiva para que la hagan realidad transformando al país, cumpliendo y haciendo cumplir la ley. Nosotros estamos decididos a crear otro mundo, la justificación la da el cansancio de este sistema que todos los días se traga y vomita manchándonos a todos, por eso está ocurriendo una revolución. Ante este hecho a los ostentadores del poder no le queda otra opción que oponerse con todas sus miserias, porque hambre no tienen, tampoco necesidad, pero carecen de sueños. Por eso temen y odian, no comprenden que en nosotros va la vida de ellos, no lo saben y se oponen, y se opondrán porque los sindicalistas corrompidos y traidores a su clase ya no podrán vender contratos y vivir a costa de las cuotas sindicales. Se opondrán porque los cobradores de comisiones al estado ya no podrán hacerlo. Se opondrán porque no bastará el currículum, habrá que demostrar en la práctica la sabiduría. Se opondrán porque los perros de la guerra ya no venderán armas. Se opondrán porque los empresarios maulas tendrán que pagar los impuestos que jamás han pagado. Se opondrán porque tendrán que demostrar en qué gastan los subsidios. Se opondrán porque la salud, la educación, la cultura y el deporte dejarán de ser un negocio. Se opondrán porque el presupuesto ya no se lo repartirán corruptos y empresarios bandidos.
Se opondrán porque el negocio de las importaciones negador de la industria nacional será pechado como debe ser. Se opondrán porque ya no podrán cobrar la comisión de 40 mil millones de bolívares anuales por el petróleo que siempre se le ha vendido a Cuba por debajo de cuerda. Se opondrán porque su racismo mal disimulado no lo podrán aplicar a plenitud. En fin, se opondrán porque ese pareciera ser su destino, ojalá comprendan.
El deber de los funcionarios y funcionarias del gobierno, de las diputadas y diputados es proteger el hacer revolucionario del pueblo, no a la inversa. Deben aprobar las leyes y no dejarse llevar por la alharaca de los opositores, que si nació un cayapo y la oposición se opone, salen corriendo a un debate estéril, a perder el tiempo, que si un señor por fuera dice que nuestro gobierno debe ser tumbado, salen corriendo a debatir con la oposición, como si no supieran que son conchas de mango que coloca la oposición, para evitar la aprobación de las leyes necesarias para el avance de la revolución, no señor para eso está la diplomacia, que si la oposición convoca una marcha, salen corriendo a convocar una contramarcha. No señor, deje que manifiesten y el gobierno debe cuidar y aplicar la ley cuando ella sea necesaria, ese es su trabajo. Las organizaciones populares, los partidos, los círculos deben dedicarse a la organización del aparato productivo, única manera de sustentar la revolución, deben dedicarse a organizar barrio por barrio, campo por campo, caserío por caserío, cooperativa por cooperativa los haceres revolucionarios, la producción revolucionaria, y cuando marchemos, marchemos por la alegría, por lo construido, por la casa nueva, por la formación nueva, por el arte, por los afectos. El reclamo de la historia es implacable, la ternura hermano, la ternura hermana, pongan cuidado de las márgenes crecidas, al run run del monte a monte, del hasta los teque-teques. Eso no es virtual, eso es de carne y hueso. Abran bien los ojos dirigentas y dirigentes, no se dejen embaucar que esta revolución no es para que nadie se luzca o satisfaga sus carencias personales, la revolución requiere de solidez y formación de sus conductores y conductoras, no es hora de la pantalla y la figuración, es tiempo del trabajo cotidiano y humilde.
Ojo, que todos y todas estamos mirando y escuchando y no hay forma de detenernos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario